Organización y cronogramas: primer paso sobre el emprendimiento

No importa si eres joven, adulto contemporáneo o mayor: los emprendimientos son una excelente posibilidad que cualquiera tiene para poder progresar. Ahora bien, para lograr el éxito con un emprendimiento, existe una cantidad enorme de factores que no se deben dejar de tener en consideración. Los más importantes, especialmente al comienzo, residen en la organización.

Emprender puede ser un arranque de muchas emociones. En este sentido, estar muy contento y entusiasmado con un proyecto es algo de suma importancia, pero para eso, hay que organizarse y tomar toda la emoción para ser canalizada en la ejecución del proyecto. Además, emoción no puede ser desorganización, sino todo lo contrario.

Un cronograma para la ejecución

Un emprendimiento no puede ser algo de un solo momento, sino que se trata de un proyecto a largo plazo que puede ser el punto de partida del éxito económico. Para poderlo planificar con certeza, es indispensable trazar un cronograma de ejecución. En el comienzo de este cronograma se debe incluir una fase exploratoria, para conocer la viabilidad del proyecto.

Saber si es posible

La voluntad y la posibilidad no siempre van de la mano, pero de la voluntad se puede hacer todo lo necesario para que sea posible un proyecto de emprendimiento. Entonces, el primer paso en el cronograma para el emprendimiento de un proyecto es saber si es factible. Para eso, se pueden hacer pequeños estudios de mercado, consultas de la competencia, cálculos del dinero que se necesita para comenzar y también de cuánto se aspira ganar.

Determinar el momento y lugar para comenzar

Muchos emprendimientos fracasan porque comienzan poniendo todos los huevos dentro de la canasta. En el cronograma, es imperativo organizarse para conseguir determinar cuál es el mejor momento para poner en práctica lo ya planificado y también dónde hacerlo. No es lo mismo comenzar un emprendimiento que se debe publicar por redes sociales a negocios directos que no requieren de promoción.

Establecer fases de consulta

Todos los proyectos deben revisarse de manera periódica. En este sentido, las personas pueden percibir cuando las cosas deben ser reevaluadas para poder mantener su viabilidad. Sin embargo, la actualización de los proyectos es sumamente necesaria porque solo a través de ella el emprendimiento podrá adaptarse a las nuevas realidades cambiantes del mercado y de la situación social.

Entonces, ¿cómo reevaluar? Una de las mejores formas es establecer, de forma fija, fases de consulta. En ellas se deberá analizar todo lo recibido, realizado y pagado hasta el momento y ver cuáles son los puntos débiles.

Habla con los otros si no estás solo

Muchas veces, los emprendimientos comienzan a ser proyectos solitarios, pero a medida que crecen, adquieren otras características e involucran el trato con otras personas. Es por eso que hay que conversar y llegar a acuerdos con todos aquellos que formen parte del proyecto, siempre que respeten su rol.

Convertir pasatiempo en emprendimiento: posibilidades infinitas

El sueño de millones de personas es trabajar en lo que aman. Lamentablemente, en el mundo de hoy, conseguir eso es una tarea que puede resultar bastante complicada, debido a que muchos dependen del sueldo para vivir, en trabajos que pueden volverse monótonos y poco apasionantes.

En ese contexto, los emprendimientos se hacen muy atractivos porque rompen con eso y le dan la posibilidad a millones de personas de poderse dedicar a lo que tanto les gusta y hacer dinero con ello.

Ahora bien, como con cualquier proyecto, existen muchos obstáculos que habrá que sortear, pero el hecho es que los pasatiempos tienen todas las oportunidades de volverse algo real, concreto y rentable económicamente. La pregunta más importante es: ¿cómo hacerlo?

¿Cómo es el pasatiempo?

Hay algo que amas hacer y eso es un pasatiempo, pero, ¿cómo es? Por ejemplo, si el pasatiempo es la jardinería, hay que escoger qué de la jardinería se va a ofrecer como emprendimiento. Puede ser servicio de jardinería a domicilio, pero también servicio de trasplante de plantas o de cuidado y reparación de algunas plantas que enfrenten situaciones complicadas.

Tomemos otro ejemplo más tradicional: la filatelia, o el arte de coleccionar estampillas. Este suele ser un pasatiempo que es muy personal, pero para volverlo un negocio hay que comerciar con él. Para ser más específicos, se pueden vender estampillas repetidas o que no tengan valor para la colección, así como comenzar a comprar y vender artículos que pueden ser útil para todos aquellos que coleccionen, como clasificadores, álbumes, hojas, separadores, entre muchos otros.

¿A quién va dirigido el emprendimiento?

Una vez aclarada el área del pasatiempo a la que se tiene la iniciativa de dedicarse, hay que pensar en el público al que le puede interesar esta área de negocios. Es posible que el emprendimiento esté dirigido hacia otras personas que también compartan ese amor por el pasatiempo, para así poderlos ayudar con sus tareas relacionadas con él.

Sin embargo, es posible que el experto en el pasatiempo seas tú y que el negocio esté enfocado en personas o empresas que necesitan de tus conocimientos en esa área. Por ejemplo, si te gusta reparar radios antiguos de tubo y radios electrónicos, pues probablemente los debas reparar a personas que trabajen con decoraciones o con sistemas de comunicación, que no son expertos en la materia.

Es por eso que una vez aclarado el público objetivo es que se puede dar pie al emprendimiento y comenzar.